Victor Javier Gonzales Santos
En esta fecha con mucho orgullo y júbilo celebramos el setenta y un aniversario de la Universidad Nacional de Agricultura. El surgimiento de esta noble institución, sin duda alguna, es un hecho histórico que ha marcado positivamente la vida de muchas personas, dado que el mismo representa siete décadas de contribución significativa con el desarrollo del sector agropecuario a nivel nacional; comprometidos con la excelencia académica, el estudio de la problemática del agro, el crecimiento económico de los productores y la disponibilidad de alimento para las comunidades.
Desde su fundación en el año 1952, como Escuela Granja Demostrativa, La Universidad ha sido un faro de conocimiento y una fuente inagotable de inspiración para quienes han pasado por sus aulas y laboratorios. A lo largo de estos años, hemos sido testigos de cómo la Universidad Nacional de Agricultura ha contribuido de manera significativa al progreso y la transformación del sector agrícola, tanto a nivel nacional como internacional.
En este setenta y un aniversario, es justo reconocer la labor que con mucho entusiasmo y entrega realizan todos nuestros colaboradores, sus esfuerzos son determinantes para el logro de los objetivos institucionales. Particularmente al cuerpo de profesores e investigadores, por su compromiso en la construcción de los conocimientos y la búsqueda incansable de soluciones a los desafíos actuales y futuros del sector agrícola; y a nuestros estudiantes, por su entusiasmo y deseo de aprender, que nos recuerdan constantemente la importancia de nuestra labor. También es oportuno extender nuestra gratitud a todos aquellos que nos precedieron, que con sus esfuerzos y sacrificios allanaron el camino para las actuales y futuras generaciones.
La ocasión es propicia para destacar y agradecer la colaboración de nuestros socios y aliados externos, quienes han brindado su apoyo y confianza en los diferentes proyectos e iniciativas institucionales; gracias a su respaldo, hemos fortalecido nuestras capacidades y ampliado nuestro alcance, posicionándonos como una institución de referencia en la educación agropecuaria.
Hasta ahora hemos avanzado en mucho, pero debemos seguir fortaleciéndonos para enfrentar los nuevos desafíos de este mundo cambiante; es nuestra responsabilidad mantenernos a la vanguardia de la investigación y la tecnología agrícola, adaptándonos a las demandas y necesidades de un mercado globalizado. Debemos seguir impulsando la innovación, fomentando la colaboración multidisciplinaria y formando líderes capaces de enfrentar los desafíos del siglo XXI. Es por esta razón que la Universidad Nacional de Agricultura debe continuar comprometida con la mejora constante de sus programas académicos, la expansión de sus infraestructuras y la creación de nuevas oportunidades para el desarrollo profesional de nuestros estudiantes.
Miremos hacia el futuro con esperanza y determinación, sabiendo que juntos podemos construir un mundo mejor para todos, a través del acceso a nuevos conocimientos y la innovación en la agricultura.
